El embarazo es una de las etapas más importantes en la vida de una mujer y es importante cuidar la alimentación durante esta fase. Muchas futuras mamás buscan alternativas saludables a los alimentos y bebidas que contienen azúcar, y en ocasiones recurren a edulcorantes artificiales. En este artículo vamos a hablar sobre los edulcorantes que se pueden consumir durante el embarazo y cuáles deben evitarse.
Los edulcorantes recomendados durante el embarazo son aquellos que se han sometido a pruebas rigurosas y se consideran seguros para el consumo humano. A continuación, se describen algunos de los edulcorantes que son seguros durante el embarazo:
La estevia es un edulcorante natural que se extrae de la planta del mismo nombre. Es muchas veces más dulce que el azúcar y no tiene calorías. El consumo de estevia no tiene ningún efecto negativo sobre el embarazo.
La sucralosa es un edulcorante artificial que se utiliza en muchos productos bajos en calorías. Es segura durante el embarazo y no se ha demostrado que cause efectos adversos. Sin embargo, se recomienda que se consuma con moderación.
El aspartamo es otro edulcorante artificial que se utiliza en muchos productos alimentarios. Se considera seguro en cantidades moderadas durante el embarazo.
Aunque muchos edulcorantes se consideran seguros durante el embarazo, otros deben evitarse porque no se han estudiado lo suficiente o porque se ha demostrado que causan efectos negativos en el feto. A continuación, se describen algunos de los edulcorantes que se deben evitar durante el embarazo:
El ciclamato es un edulcorante artificial que se ha relacionado con defectos congénitos en animales de laboratorio. Los estudios en humanos son limitados, pero se recomienda evitar el consumo de ciclamato durante el embarazo.
El acesulfamo-K es otro edulcorante artificial que se utiliza en muchos alimentos y bebidas. Aunque se considera seguro, no se ha estudiado lo suficiente durante el embarazo, por lo que se recomienda evitar su consumo.
La sacarina es un edulcorante artificial que se ha relacionado con defectos congénitos en animales de laboratorio. Aunque no se ha demostrado que cause efectos negativos en humanos, se recomienda evitar su consumo durante el embarazo.
En definitiva, durante el embarazo, se pueden consumir algunos edulcorantes, como la estevia, la sucralosa y el aspartamo. Sin embargo, existen otros edulcorantes, como el ciclamato, el acesulfamo-K y la sacarina, que se deben evitar porque no se han estudiado lo suficiente o porque se ha demostrado que causan efectos negativos en el feto. En cualquier caso, se recomienda el consumo moderado de edulcorantes durante el embarazo.